En julio de este año salió la revista del Life Ball 2015, el evento de caridad más extravagante del mundo, que busca recaudar fondos para combatir el VIH/SIDA. LLegué a ella a través de un post en Facebook que anunciaba que la vida imitaba al arte de Gustav Klimt, y en seguida, una fotografía que me dejó prendado: un hombre con la colita al fresco, en un acto de amor arrebatado, preso en los brazos de una mujer, con un fondo dorado, en un prado de flores y, detrás, un coro de musas epifánicas ¡A.L.E.L.U.Y.A!

Qué fuerte, y cuánta evanescencia al mismo tiempo... Arrebatador. Sí. Pero para colmo, el destino iba a ser más desprendido conmigo: esto no era todo; de hecho, esto era solo el comienzo del final, (del final por ahora). Pues entré al PDF de la revista del Life Ball 2015 y vi el resto de hermosas imágenes que componían un friso. Solo las vi (separadamente) y me deslumbré en primera instancia. Pero luego las corté de las páginas y las pegué todas juntas para componer el friso en todo su recorrido, tal cual se habría visto en la vida real: el resultado fue aun más enloquecedor y ahora engalana mi blog como imagen principal. (de hecho, ahí se ve mejor)

La fotografía de arriba, de Inge Prader, ciertamente imitaba el glorioso final del misterioso 'Friso de Beethoven' de Klimt. Es solo la última imagen del friso. Lo que viene al comienzo, su desarrollo y leitmotif, las adiciones personales, sus antecedentes, la chismografía en torno a ella, la revista del Life Ball, en fin, todo el conjunto, es lo más hermoso y enloquecedor que he experimentado en cuanto al arte en los últimos tiempos. A continuación, expongo el friso palmo a palmo, con su raison d'etre, para mayor efecto:
el friso palmo a palmo

1. La sufrida Humanidad, impulsada por el anhelo, implora al caballero de brillante armadura emprender la lucha por la felicidad. Determinación en su mirada, acompañado de la Compasión y de la Ambición, el caballero no delata ninguna señal de vacilación y se dispone a enfrentarse a las fuerzas del mal y a las tentaciones... ↓↓↓

2. A pesar de su inquebrantable voluntad de tener éxito, el caballero se ve acosado por peligros. El gigante Tifón prohíbe su paso, flanqueado por la Enfermedad, la Locura y la Muerte y con el apoyo de sus hijas las Gorgonas, cuyas miradas -de terror paralizante- convierten al espectador en piedra. La Lujuria, la Impudicia y la Intemperancia también acechan de trecho en trecho, tentando al caballero a dejar el camino recto hacia la felicidad en lugar de vivir la vida dulce al máximo... ↓↓↓

3. El exceso desenfrenado puede producir una angustia insoportable. Sin embargo, la alegoría del Life Ball, en la forma del ángel dorado, el Ángel del Dolor, lo toma bajo su ala, y muestra el camino hacia la poesía como fuente de consuelo...↓↓↓

4. Las artes acuden en ayuda de la Humanidad y la conducen hacia un reino ideal en el que el viaje encuentra una culminación gloriosa. Un coro de ángeles jubilosos da la bienvenida a los anhelantes; un beso redentor le pone el sello a la felicidad perfecta... ↓↓↓ 


El friso ilustra la búsqueda de la felicidad del hombre en un mundo tempestuoso en donde uno contiende no solo contra las fuerzas del mal externas, sino también contra nuestras propias debilidades interiores. El ansia de felicidad encuentra su sosiego en la poesía, y el hombre accede al reino encantado del arte, donde encuentra amor y alegría en estado puro: un coro de ángeles parece cantar: "Alegría, hermosa chispa de los dioses. ¡Este beso para el mundo entero!" Parte del apoteósico poema Oda a la alegría de Frank Schiller, en el que Beethoven se inspira para componer su Novena Sinfonía, la cual eventualmente impactaría a Klimt.

Ciertamente, el Friso de Beethoven de Klimt es una obra grandiosa, y este homenaje de la fotógrafa Inge Prader para el Life Ball 2015 reinventa y retiene absolutamente toda su belleza. Para Gustav Klimt, la medicina, la filosofía y el derecho no podían asegurar una vida satisfactoria y feliz, y solo el arte podía salvar a las personas. Gustav Klimt y los Secesionistas Vieneses eran unos idealistas del arte. Buscaban que el arte impregnara todas las dimensiones de la vida como respuesta a los efectos automatizantes y/o desalmados de la Revolución Industrial de "fin de siècle". Su objetivo estético era la 'obra de arte total', espacios pletóricos de arte en la que cada elemento contribuye a crear un efecto unitario en nombre de un concepto superior de belleza. Justamente, las exhibiciones de la Secesión apuntaban a este fin, y el Friso de Beethoven fue solo un complemento de una exposición más grande en torno al genio músico, donde la epifánica/enloquecedora escultura polícroma Beethoven, de Max Klinger, fue la pieza central.

Beethoven de Max Klinger

Por supuesto, es idealista y sin embargo, hasta cierto punto, muy peligroso pensar que la belleza o el arte pueden salvarnos. Uno puede estetizar hasta al mismo diablo. No funciona de esa manera. Lo que sí creo, es que el arte nos da la alegría, la chispa de los dioses. No nos asegura la salvación. Pero todos, desde los más simples hasta los condenados, absolutamente todos los seres humanos lo necesitamos para vivir una vida más deliciosa.

Entonces, recapitulemos: el Life Ball junto a la fotógrafa Inge Prader imitan 'El Friso de Beethoven' del pintor Gustav Klimt. Gustav Klimt se inspira en la Sinfonía n.° 9 del músico Ludwig van Beethoven para pintar su friso. Y el músico Ludwig van Beethoven, a su vez, se inspira en el poema Oda a la alegría de Frank Schiller para componer su sinfonía.

Haciéndole el seguimiento a estas fotos, he aprendido muchas cosas. Caridad + Fotografía + Pintura + Música + Poesía + Obra de Arte Total + Historia. Pero me voy con una lección más edificante: la "obra de arte total" necesita la mano de una acción desinteresada y meta-artística en la vida real para salvar a alguien. Como en este caso, que es dar un ejemplo de compasión y solidaridad para salvar vidas.

Gallermic

Anexos

- El Friso de Beethoven, de Gustav Klimt, en el edificio de la Secesión en Viena:


- La Novena y Última Sinfonía de Beethoven


- La revista del Life Ball 2015, con Conchita Wurst en la portada:

La revista LIFE BALL 2015 

- El edificio de la Secesión Vienesa, en Viena


Otras deíficas fotografías de Inge Prader para el Life Ball 2015, algunas inspiradas en Klimt:

- Danae:


- Muerte y Vida (¡con la inclusión de Egon Schiele y el mismísimo Gustav Klimt!):


-El Vellocino de Oro:


- Marte y Scanis


- Pan y Flora


- El Rey Midas


- Ver Sacrum (Santa Primavera)


- Higía, La Medicina: